Cariño mío
Siete, son los motivos
Por los cuales, me negare
Rotundamente, a extinguir
El sagrado fuego
De tan excelsos sentimientos
Hacia ti, todita tuya; humana.
Siete veces, a la semana
Un tenue rayo de sol, atraviesa la ventana
Y mi habitación, oscura y cuadriculada
Se convierte en un manojo de colores
Algo similar, le ocurre a mi cabeza
Cuando tu luz, traspasa mis pupilas
Das vida a la vida misma, plenitud entera.
Cuando escucho detenidamente
En la azotea, el canto de los pájaros
Pienso en libertad, en volar
En perseguir mis sueños, en Do Re Mi, Fa, Sol La, Si
Luego deseo tus labios, como quien desea
Destruir los barrotes, de su propia cárcel
Y proclamar la revolución de la alegría, el amor y la lujuria
En la regadera, todo tipo de fantasías
Ocurren en mi mente, como fluye el agua por mi cuerpo
Por ejemplo, fantasea mi lengua con cada centímetro de tu carne
Al tiempo, lo hace mi olfato, deleitándose con ese perfume de olor a sexo
Y mis expedicionarios dedos, están siempre expectantes
A la empresa de aventurarse, por los siete continentes y siete mares
De tu indescifrable geografía, humana mía.
Siete, son los pretextos
Para amarte, de lejos
En las sombras, en silencio
A secas
Como una mascota
A mi manera
A ti , a otras
De siete maneras
Lastimas mis corazones
De siete maneras
Me las arreglo para quererte
De siete maneras
Resucito
Sin tu ayuda
Siete vidas, un gato tiene
y he gastado tres
Faltan cuatro, y aquí concluiré
Siempre Tuyo
Mariscal Bigotes